El pasado 20 de noviembre, en la Salle Antúnez conmemoramos el Día Internacional de los Derechos de la Infancia, una fecha clave para recordar la importancia de garantizar un entorno seguro para todos los niños y niñas, inclusivo y lleno de oportunidades. En esta jornada reflexionamos sobre la necesidad de trabajar unidos para proteger y promover los derechos de los más pequeños, sentando las bases para su desarrollo integral como personas.
UNICEF nos recuerda que los derechos de los niños no son un lujo, sino una necesidad esencial para su desarrollo y bienestar. Cada niño y niña tiene derecho a la educación, la salud, la protección, y a vivir en un ambiente libre de violencia y discriminación.
Estos derechos aseguran que puedan crecer y desarrollarse plenamente, convirtiéndose en ciudadanos responsables y felices.

La Convención sobre los Derechos del Niño, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1989, es el marco legal más importante de este tema. Este documento establece derechos fundamentales en la infancia como el acceso a la educación, la salud, el juego, la participación en la vida familiar y comunitaria, así como la protección frente al abuso, la explotación y el abandono. Un recordatorio para todas las instituciones y comunidades que tienen la responsabilidad de priorizar el bienestar de todos los niños y niñas.

En la Salle Antúnez creemos firmemente que la educación es clave para sembrar conciencia sobre la importancia de proteger los derechos de la infancia. Alentamos la sensibilidad de nuestra comunidad sobre crear un entorno seguro donde los niños puedan crecer con confianza, amor y respeto.
La celebración de este día nos invita a reflexionar sobre el compromiso colectivo para garantizar que ningún niño o niña se quede atrás, porque al proteger sus derechos estamos construyendo un futuro mejor para todos.
Sigamos trabajando para que cada niño y niña, tenga la oportunidad de ser lo que sueña ser.